lunes, 10 de mayo de 2010

51. Yo sé lo que ve cuando te mira.

Yo sé lo que ve cuando te mira,
esos ojos oscuros, llenos de misterio,
las largas pestañas
ese bosque de silencio.
La nariz que se arruga con la risa.
La boca de rosa, dichosa de la alegría.

Yo sé lo que ve cuando te mira,
Esas palabras de amor que le dedicas,
tus suspiros de agua,
la frescura de la fuente de tu risa;
esa perpetua risa que es como la lluvia
para nuestra edad de sequías.

Yo sé lo que ve cuando te mira,
mas no sabes que sé lo que tú no ves al verle a él.
Sólo son un puñado de años,
un puñado de tazas de café
que se amontonan en el fregadero.
Y la vida que sigue, y sigue…
Y nunca se detiene a esperar.

Yo sé lo que ves cuando le miras.
Guardaré el secreto de tu risa.


Para aquel que corrió el riesgo cardíaco de enamorarse de una niña tan joven, tan joven, que aún le creía sus historias para no dormir y le reía hasta las lágrimas todas las bromas. Nada dura para siempre pero… ¡cómo gozaste mientras duró!